La rehabilitación del Complejo Termal, una prolífica política de obras públicas y la fuerte presencia de la iniciativa privada en el ámbito de la construcción de viviendas, son algunos de los aspectos positivos que caracterizaron este año 2010 para los vecinos de Bernardo Larroudé. También hubo lugar a la preocupación por la cuestión ambiental. Lo negativo.
El reinicio de la plena actividad turística, el 3 de julio de este año, como consecuencia de la puesta en marcha -privatización mediante- del Complejo Termal, fue un hecho que marcó el la mirada optimista hacia el futuro de las actuales autoridades comunales y, a no dudarlo, el hecho más importante que se produjo durante el año máxime cuando puso fin a casi tres años de inactividad en el sector de la economía local.
Consecuencia natural de la finalización de la obra de remodelación y ampliación de ese complejo, encarada por la gestión del gobernador Verna durante el período de gobierno anterior, que insumió más de un millón de pesos al gobierno provincial y dos años de intenso trabajo al actual intendente Néstor Hugo Tribolo para lograr la remediación de diversos falencias de construcción, primero, y la privatización del complejo después.
Obras Públicas
Empero, la finalización de la remodelación del Complejo Termal no ha sido la única obra pública –aunque tal vez si la de mayor magnitud- iniciada o finalizada en el curso de este año. En efecto, una recorrida por la planta urbana nos permite visualizar un total de 1400 metros de calles entoscadas recientemente, 800 metros de cordón cuneta, 300 metros de bacheo en pavimento y 11 badenes de cemento, además de una senda aeróbica paralela al Acceso Presidente Juan Domingo Perón de casi 800 metros.
Con motivo del Bicentenario, fecha en que vio a luz una simpática iniciativa docente como fue la creación de la murga del Bicentenario compuesta por niños en edad escolar, se inauguró la Plazoleta alusiva a la fecha.
También este año se remodeló la Casa de la Cultura, se efectuaron diversas reparaciones en el edificio comunal y, recientemente, finalizó la obra de reparación integral de la Terminal de Ómnibus
Con motivo de haber sido designada esta localidad sede de los XI Juegos Deportivos Pampeanos de Verano en el predio termal se construyó un nuevo complejo de sanitarios, se repararon los juegos infantiles, se construyó una rampa para discapacitados en la pileta deportiva y se inició la ampliación de la iluminación del predio termal.
Viviendas
Un paso significativo hacia el objetivo de minimizar el ya endémico déficit habitacional que experimenta nuestra localidad vino de la mano de planes oficiales. Una rápida enumeración nos permite contabilizar un barrio de 12 viviendas ya terminado y a punto de entregarse, otras 6 colindantes a punto de comenzar y otras 4 recientemente licitadas, todas estas correspondientes al Plan Federal.
A estas se suman otras 4 finalizadas o en avanzado estado de construcción, correspondiente al plan Descentralización consistente en créditos que la provincia entrega a quienes ya poseen un terreno donde construir.
Iniciativa privada
En este rubro corresponde sumar, asimismo, el aporte de una iniciativa inédita para nuestra localidad: el remate en subasta pública de doce solares con muy buena ubicación que le reportó al municipio un ingreso de más de 220.000 pesos y a sus flamantes propietarios la posibilidad de iniciar la construcción de sus viviendas reforzándose así una tendencia que hace muchos años no se veía de viviendas construidas por iniciativa privada que se reflejan en ocho unidades habitacionales, algunas ya finalizadas y las demás en avanzado estado de construcción.
En definitiva, el 2010 podrá ser recordado, con toda justicia, como “el año de la construcción”, por los vecinos de Bernardo Larroudé.
La cuestión ambiental
Tal vez como nunca antes, la preocupación por el medio ambiente este año se evidenció con fuerza entre los vecinos de esta localidad. En efecto, en marzo de este año fueron numerosas las quejas de vecinos por la actividad de planta cerealera ubicada en la planta urbana.
No era para menos. Incontables partículas, de color rojizo, inundaban el ambiente manteniéndose en suspensión en el aire, se metía en las viviendas, ensuciaban los patios, atiborraban los techos, tapaban las canaletas, estropeaba el agua de los aljibes e irritaba las vías respiratorias de los que estaban obligados a vivir o trabajar en las cercanías de la planta de acopio, una zona de hasta 400 metros a la redonda, contaminada por la gran cantidad de hollejo o cáscara de maíz que se desprendía del grano durante el proceso secado de ese cereal.
Las quejas, unánimes y coincidentes, estaban motorizadas por el temor subyacente de que esas “cascaritas” ocasionaran problemas de salud, más allá de innumerables molestias de tipo doméstico. Y si bien desde el Centro Asistencial local se procuró llevar tranquilidad sobre ese punto la insistencia de los vecinos llegó hasta los medios de prensa y por intermedio de ésta a los despachos oficiales.
La visita de técnicos en Saneamiento Ambiental del gobierno de la provincia vino a confirmar la razonabilidad de la mayor parte de las quejas vecinales, por lo que intimaron a las autoridades de la empresa a elaborar un plan de remediación que debería entrar en vigencia, a más tardar, en un plano no mayor de 30 días.
No obstante, no fue suficiente. La actividad prosiguió, las medidas de remediación no se efectivizaron y las quejas vecinales –aún dentro de una polémica entre los afectados y quienes privilegiaban el hecho de que se trataba de una importante fuente de trabajo- obligaron a una segunda intervención oficial.
Fue el 1º de julio de este año. Vencido con exceso el plazo primitivamente otorgado, los técnicos ambientalistas oficiales verificaron que persistían las condiciones de polución constatadas, por lo que mediante acta se intimó a la empresa “a cesar de inmediato toda actividad que sea productora de material particulado que pueda afectar la calidad de vida de la población circundante” habida cuenta que se verificó la carencia de depuradores ciclónicos, no se había instalado la jaula de retención, no se colocó la cortina faltante en la zona de descarga de camiones y la colocada está en muy mal estado y no se han cambiado los filtros obstruidos de las mangas”.
Las autoridades de la empresa afectada se negaron a efectuar declaraciones públicas. No obstante, “off de record” confiaron que se estaba trabajando en el tema y explicó que “es política de la empresa no hacer declaraciones, prefieren contestar con hechos” y confió que “para la próxima cosecha estos problemas habrán dejado de existir”.
Esa cosecha a la que se refería nuestra informante es la que está a punto de comenzar en estos días.
Lo negativo
Aunque parezca contradictorio, uno de los hechos más importantes del año fue que un pronunciamiento judicial que, aunque esperado, finalmente no se produjo.
En efecto. Es de público conocimiento que la ex intendente María Cristina Paso de García se encuentra involucrada en una causa por la cual se ventilan ante la justicia diversos hechos, aparentemente irregulares, que surgieron de una auditoria externa dispuesta por el actual mandatario municipal, Néstor Hugo Tribolo, al asumir sus funciones.
Hace de esto, exactamente, tres años.
Desde entonces, fue este el año que la investigación –por lo menos a la luz pública- más actividad registró. El Juzgado que tiene a su cargo la causa recibió innumerables declaraciones testimoniales y dispuso la realización de otras diligencias, algunas de las cuales trascendieron a la prensa y ocuparon titulares de primera plana.
Todo hacía presumir que antes de fin de año se conocería un pronunciamiento, en un sentido o en otro. Lo que no sucederá por que el expediente en cuestión se encuentra en la Fiscalía a quien se le corrió vista en los primeros días de este mes a la espera de que el o la funcionaria que tiene que intervenir…. regrese de sus vacaciones.
Es innegable la trascendencia que en la comunidad tendría un pronunciamiento judicial en una causa de tanta importancia. Por las connotaciones políticas que tal causa –y su resolución- tienen para todos los vecinos de una pequeña localidad que no pueden evitar verse envueltos en una polémica que no tendrá final antes de un año eminentemente electoral.
Un viejo proverbio italiano reza: “giustitia ritardata, giustitia denegata”. Por que no es justo para nadie que la verdad, la definición de inocencia o culpabilidad de una persona, para colmo una ex funcionaria pública con legítimas apetencias políticas, se demore indefinidamente -con la incertidumbre consiguiente- y aumentando la sensación de confusión general en la que “todo vale” que suele caracterizar a la política en general.
Tal vez no sea este el caso, pero a veces las dilaciones terminan provocando que algunos abogados encuentren alguna artimaña para solicitar la prescripción de las causas. No sería ésta la primera vez.
El efecto de este tipo de desenlaces en la ciudadanía necesitada de confiar en todas las instituciones de la democracia, es desalentador. Provoca que se mire con escepticismo a la Justicia -una institución básica para el mantenimiento del orden colectivo- desalienta la denuncia de delitos y aumenta la sensación de impunidad.
¿Qué nos espera?
Ni más, ni menos que lo que sepamos construir. El 2011 no será muy diferente a los años ya vividos. El sólo hecho de marcar un número diferente en el calendario no significa que mañana, cuando nos levantemos, encontremos un Larroudé diferente al de esta noche, al momento del brindis.
Los cambios no se suceden por arte de magia ni como resultado del mero voluntarismo. Es necesario trabajo, concientización, educación y, sobre todo, un gran esfuerzo no sólo desde lo individual, lo que es más difícil, también desde lo colectivo.
No obstante, que eso no nos prive de brindar con alegría, de conformidad a paganas tradiciones ancestrales y en el balance que cada uno de nosotros haga le agregue a éste el sinnúmero de aspectos que seguramente considerará omitidos. Y todos, cada uno desde su lugar, seguro tendrá un rincón donde guardará los momentos de dolor que como comunidad tuvimos que vivir este año.
Hasta el año que viene. Cordialmente
