ROBARON 300 MIL PESOS EN LA COOPERATIVA DE TAMBEROS

Trescientos mil pesos entre efectivo y valores le sustrajeron a la Cooperativa de Tamberos Unidos de esta localidad, en la madrugada de hoy a pesar de contar con un sistema de alarma sonora, dos perros guardianes, candados en la verja y pesada caja fuerte. Los funcionarios policiales estiman que es un trabajo de profesionales o, al menos de delincuentes avezados en este tipo de hechos.

La imagen muestra la puerta posterior violentada y un vecino asombrado de la labor de los delincuentes
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Cuando el personal administrativo de la Cooperativa ingresó a sus labores, en la mañana de ayer aproximadamente a las 8, pudo constatar –obviamente, no sin sorpresa- que manos anónimas habían violentado la caja fuerte de la que se llevaron aproximadamente 300 mil pesos, la mitad de ellos en valores.
La intervención de la policía se produjo de inmediato, pero igualmente el trabajo de investigación arrojó magros resultados. Por ejemplo, no se pudieron localizar huellas de vehículo alguno por que a esa hora ya había pasado el camión regador. La eficiente labor de un servidor municipal, en este caso, a la postre resultó contraproducente.
Como suele ser habitual, nadie vio ni escuchó nada.
En horas de la noche, sobre todo días de semana, después de las 24 que cierra la estación de servicios ubicada enfrente, salvo que los perros se alboroten por algún animal suelto, nada interrumpe la calma pueblerina.
La detección de algunas huellas de calzado permite a los investigadores deducir el orden secuencial los hechos probables.
Según esta fuente, como primera medida uno de los maleantes se habría ocupado de anular la alarma sonora exterior inyectándole poliuretano expandido en su interior. Es de hacer notar que el sistema es obsoleto, hace más de 14 años que fue instalado y carece de monitoreo.
Luego se habrían dirigido al patio posterior, cercado por una verja de hierro. Barretearon el candado y abrieron el portillo para después presumiblemente refugiarse en una zona de malezas existentes en las adyacencias.
La acción de abrir el portillo y no ingresar de inmediato encontraría su explicación en que, de esa forma, anularon a dos perros de gran tamaño que habitualmente moran en el patio de la entidad. Un gran danés y un pastor alemán. Buenos perros, de imponente porte pero, acostumbrados al encierro, vieron la oportunidad de ganar la calle y su atención se dispersó.
Luego se supone que ingresaron al patio, violentaron una puerta de verja que protege la entrada de la cocina. A través de la misma llegaron hasta las oficinas administrativas donde cortaron los cables del teléfono, apagaron las luces externas y destruyeron la bocina interna y el gabinete de control de la alarma.
Con toda comodidad procedieron a perforar certeramente una de las puertas de la caja fuerte con un macho para hacer rosca y de esa forma hicieron saltar el mecanismo de la cerradura, apoderándose del dinero en efectivo y valores existentes en la misma, un monto mayor al habitual ya que se encontraba allí el producto de ventas de productos lácteos realizadas el viernes por la tarde, a más de una importante venta de cerdos concretada también en esa fecha. Lo sustraído estaba destinado al pago de la leche entregada por los tamberos asociados durante esta primera quincena.
“No se si profesional, pero por lo menos un trabajo muy certero”. Así lo describió uno de los funcionarios policiales abocados a investigar el hecho. De la misma fuente se supo que los atracadores habrían trabajado con guantes, por lo que no son muy optimistas sobre las huellas digitales encontradas las que, obviamente deberán someterse a cotejo.
Además de la policía local, a las órdenes del comisario Marcelo Vidoret, se hicieron presente en el lugar efectivos de la División Criminalística, de la Brigada de Investigaciones y el segundo jefe de la Unidad Regional II, Comisario Inspector José Luis Palacios.